martes, 27 de agosto de 2013

RAFAEL CHIRBES: "La gente está indignada, pero si el César dejara caer unos euros se acabaría el problema"

VALENCIA. Rafael Chirbes (Tavernes de la Valldigna, 1949) en su viaje del alma lleva varias marcas, haber vivido la posguerra, ser hijo de republicano, marxista y poco amigo de los predicadores. Estudió Historia Moderna en Madrid, trabajó como profesor de español en Marruecos y al regresar a España se dedicó a la crítica literaria, gastronómica (revista Sobremesa) y a escribir novelas.
Una de ellas La larga marcha (1996) fue galardonada en Alemania con el premio SWR-Bestenliste. Los alemanes le adoran. Otra fue llevada a la pantalla por Pepe Sancho, Crematorio (2007), a quien apenas conoció. Un retrato de la especulación inmobiliaria, Premio Nacional de la Crítica y un avance temático de su última novela,En la orilla, donde la corrupción ha llegado a tal punto de putrefacción que anuncia un abismo desolador y sin esperanza. Rafael vive en el campo, en Beniarbeig, con sus animales, sus libros, sus guisos y alejado de la vida social de la que dice, apenas puede uno aprender a conocerse mejor.


-¿España se acerca más a un pantano, que lo traga todo, o a una república bananera, caracterizada por la corrupción?
-No sé. La imagen del pantano es con la que empieza la novela, un lugar que se traga las vidas de los que no se atreven a subir en la escala social y un lugar donde todo se pudre.

-¿Entonces, cree que estamos evolucionando?-Todos vemos y vivimos lo que está pasando y no sé hasta qué punto puede ser interesante mi opinión. No me gustan mucho los predicadores.

-Hablemos de su novela. ¿Qué imagen le inspiró ponerla en marcha?-Yo mismo. Yo soy todos los personajes. Cuando quiero ver a un corrupto me miro a mi mismo, cuando quiero ver a una puta, me vuelvo a mirar, etcétera. Dentro de uno está todo, porque somos parte del tiempo en el que vivimos. Cada una de mis novelas reflejan el tiempo en el que estoy.

-En sus novelas hay imágenes que se repiten como la familia y los hijos.-Sí. Nunca he vivido con mi familia y con mi hermana no he discutido jamás, pero siempre aparece la familia en mis novelas. Es el núcleo de la historia de España. YEn la orilla uno de mis personajes repite lo de: "si esto no explota es porque la familia está ahí, porque los parados viven de la jubilación de sus padres". Y respecto a los hijos también se repite la imagen del hijo que reniega del padre e incluso se avergüenza. Sin embargo, como digo en la novela, "Si para algo sirve el dinero es para comprarles inocencia a tus descendientes". Aunque estas historias siempre acaban con la imagen del hijo que se avergüenza de su padre.



-De la especulación inmobiliaria a la crisis en mayúsculas ¿lo próximo será escribir sobre la esperanza y oportunidades de futuro?-No sé lo que voy a escribir a continuación. No soy un escritor profesional. Entre una novela y otra pueden pasar años. Incluso las novelas que escribo desconozco su trama y personajes hasta que no llevo mucho tiempo en ellas. Aprendo de lo que tratan escribiéndolas. Envidio a los novelistas que saben por anticipado qué escribirán dentro de unos años e incluso te desmenuzan la trama.

-¿Pero habrá esperanza?-No creo. La esperanza... de una muerte apacible, de no pasar muchos días en el hospital, quizá, pero la esperanza per se es decepcionante.

-¿Por qué?-Porque vas viendo que vas perdiendo facultades, que cada vez eres más invisible y te resulta más difícil ocultar tus defectos...

-Leí que tras acabar sus primeras novelas se emocionaba e incluso lloraba, pero que ésta última le ha dejado seco, ¿es así?-Sí, no creo que tenga que ver mucho con la vejez, más bien con que cada día que pasa uno se vuelve más de corcho. Se pierden ilusiones. Por eso escribir es como subir al monte Carmelo, un proceso de conocimiento de uno mismo, del papel que uno ocupa en el mundo, en qué mundo vive, etc y... es duro.

-¿Qué es lo último que ha aprendido?-Lo que he aprendido lo dejo en la novela y luego lo olvido. No podría llevar esa carga.
-¿El éxito se le sube a la cabeza?-¿Qué éxito? No sé lo que es eso.

-Conseguir que una novela se convierta en serie de televisión no es muy habitual en España-Eso no me afectó para nada. Que tenga buenas críticas. Por una parte te halaga y por otra, piensas: "¡Madre mía! ¿No me estarán haciendo una chaqueta demasiado grande para mi cuerpo?". El éxito no te resuelve ningún problema. Y en mi caso sigo llevando la misma vida que llevaba hace 12 o 15 años. Y tampoco se trata de éxito económico porque con la literatura no te haces rico.

-¿Uno se puede corromper con la literatura?-Digamos que le puede corromper la vanidad. A mí no me gusta mucho la vida social y procuro alejarme de esos actos sociales donde quieren presentarte gente. Creo que ya conozco la suficiente.

-¿Alternando hay o no fuente de inspiración?-No lo sé. Pero prefiero inventármelos a verlos.

-¿Cómo es posible escribir sobre la marcha?-Todo empieza con un malestar, una inquietud. Y ahí empieza mi ascensión que supone a la vez una manera de limpiarte, de quitarte esa suciedad que se te pega del mundo en qué vives...y van apareciendo los personajes. De manera sombría surge uno, otro le lleva la contrario, un tercero equilibra...

-¿Qué malestar se convirtió en el punto de partida?-Ver lo que pasa, a través de las noticias, que escucho mientras preparo la comida, y preguntarme dónde va esto. En mis dos últimas novelas lo que he querido era reflejar el estado del alma humana a principios del siglo XXI y hablar sobre los hilos que la mueven.

-¿Cómo el dinero?-Sí. En la otra vida no sabemos, pero en esta, desde que llegamos a esta vida y reflejamos en documentos, el dinero ha sido el valor por excelencia. En ésta sexo, poder y dinero se intercambian y reflejan en los espejos culturales. "¿Has probado este vino?; ¿has estado en tal sitio? ¿Conoces a menganito?..."Todo forma parte del manto del poder.

-¿Cuándo finalizó la novela se le quitó el cabreo?-Yo no estoy cabreado, estoy hasta los huevos de todo, que es distinto. Y es como están todos.

-¿Cree que está la sociedad preparada para ir más allá?-Es que, estas preguntas van contra mis principios narrativos porque no tengo ni pajolera idea de nada. Ellos sabrán. Soy un novelista realista que cuenta lo que ve y forma parte de mí. No soy ni un cura para prometer la otra vida; ni un político para prometer cosas en esta; ni un psiquiatra para consolarle. Cuento lo que hay. ¿Ay, es que son muy duras sus novelas porque no dan esperanza? La esperanza se la busca uno donde puede. A mí no me gusta que me den esperanza. Una de las cosas más ridículas que ocurre es cuando se produce un accidente y mandan una legión de psicólogos. Si pierdo a alguien ya lloraré y asumiré mi propio duelo, no necesito que venga un desconocido para hablarme de mi pena.

-¿Y usted vive sin esperanza?-Pues sí. Para qué la quiero. ¿Usted la necesita?... ¿Cree que este país va a ir mejor el año que viene?

-Se lo pregunto a usted-No lo sé, ni puedo responder. En todo caso, creo que va a ir a peor, pero es mi opinión. No me gusta que cojan a los escritores como predicadores y nos pregunten qué pensamos del bien o del mal. Los escritores no deberíamos hablar. Llevo un mes hablando como una cotorra. Eso sí, en mayo se acaba la promoción y me callo.

-Bueno, pues tenemos tiempo. Hay quien opina que España necesita voces diferentes al status quo que ha adormecido a la sociedad para resurgir...-Sin embargo yo me temo que con una lluvia de euros desaparecerá el problema. La gente protesta, está indignada y se envalentona...pero con que llegara el César y dejara caer unos cuantos euros se acababan las protestas. Porque la indignación no plantea nada nuevo, solo es una queja por no poder seguir como estaban antes.
-Desde esa perspectiva ¿da a entender que el ser humano no ha evolucionado y se deja corromper por unas monedas?-Así ha sido durante los últimos años. En la transición como todo iba bien, todo el mundo se tragó lo que fuera, ni hubo referéndum para entrar en Europa, ni referéndum para asumir el euro...pero como iba bien y Europa mandaba dinero pues era estupendo. Ahora que Europa quiere recuperar su inversión, son mezquinos. En España los dos grandes partidos y los partidos nacionalistas secuestraron el poder a finales de los 70 y se repartieron la tarta. Ahora se pone el foco en la corrupción. Pero ¿por qué se extrañan, si ya en los 80 la corrupción campaba a sus anchas? Lo que pasa es que todos giraban la cabeza porque llovía el dinero y les iba bien. A esto se suma la impunidad excesiva en la que se ha vivido. Lo que ocurre actualmente es que con la crisis la gente se vuelve más exigente. Y exclama: "¡Anda, se lo han llevado todo!". No. Se lo estaban llevando delante de tus narices desde hace años, pero no interesaba verlo porque cada uno se llevaba un poquito.



-¿Los escritores de hoy escriben más sobre lo que pasa o sobre lo que pasó, como la Guerra Civil? -Sobre la Guerra Civil se empezó a escribir cuando llegó el PP al poder. Hasta ese momento estaba hasta mal visto escribir o hacer películas al respecto. Fue el PSOE el impulsor de una idea que estuvo frenada mientras estuvieron ellos en el poder, por lo que más tarde fue un uso partidista. Cuando el zapaterismo puso en marcha la memoria era ya una memoria inocua, todos se habían muerto. Pero en los años 80 estaban ahí. Sacar a la luz, entonces, la memoria hubiera sido duro de tragar. Había gente que había pegado tiros en la nuca y ocupaban cargos en la administración. ¿Qué hacer?. Se silenció. Se inventó la movida, las artes se impulsaron conciertos...llovió el dinero. Por otro lado la novela no es lo que cuentas, sino desde dónde lo cuentas. Hay gente que utiliza la literatura con oportunismo o la ponen al servicio de alguien. Sin ir más lejos, al servicio del zapaterismo estuvo toda una hornada de novelas sobre la guerra civil, era una literatura del régimen aunque fingiera ser una literatura de los perdedores. En realidad lo que estaban haciendo es mantener un Gobierno, con una visión seráfica que no se correspondía con la realidad. Por eso casi nadie hablaba de la acumulación de capital, de la sobreexplotación.
-¿Qué opina de la República?-Depende de quien lo diga. Esto fue otra moda que nació durante el gobierno del PP, porque anteriormente nos llamaban locos cada vez que nos reuníamos cuatro republicanos.

-¿De la monarquía española le atrae algo?-Pues no. Todos sabemos que el Rey ha estado haciendo negocios con Colón de Carvajal, con De la Rosa, etc. De la Rosa dio dinero a puñados para que España entrara en la guerra de Kuwait. Esto lo sabe todo el mundo, igual que se conoce que prosigue la tradición familiar de infidelidad. De todos modos estamos asistiendo a un tiempo raro. Asistimos al suicido de la clase política porque o llegan a un pacto o esto se va al carajo. Es muy raro que esté aflorando todo lo que ya se sabía.

-¿Será una subida al monte Carmelo?-Desde luego estamos famélicos y la crisis ha creado un descontento del que quieren aprovecharse los partidos populistas para ver qué chupan. Lo que está claro es que el poder no lo tenemos los ciudadanos, lo tienen las multinacionales.

-Ha sido crítico periodístico, literario, gastronómico...¿sigue siendo crítico?-A mí lo que me ha ayudado sobre todo es haber sido marxista y haber leído a Marx. Te permite entender que no tienes un alma particular sino una de tu tiempo. Eres como eres porque piensas y deseas en tu tiempo. Actualmente me gusta mucho el escritor francés Laurent Mauvignier y concretamente su obra "Hombres".

-Por cierto ¿qué le quedó de su paso como crítico gastronómico?-Haber sido gastrónomo antes que fraile me ha enseñado a cocinar, apreciar la comida bien hecha y huir de la comida preparada.

ENRIQUE DEVESA: "Si la economía va bien la revalorización de las pensiones estará por encima del IPC"

VALENCIA. Profesor de Economía Financiera de la Facultad de Economía de la Universidad de Valencia, miembro del Instituto de Actuarios Españoles y experto en materia de pensiones y protección social, J. Enrique Devesa (Valencia, 1960) forma parte del comité de expertos para la reforma de las pensiones impulsada por el Gobierno cuyas recomendaciones se han debatido recientemente en el Parlamento español y servirán de guía para el futuro Pacto de Toledo.
De momento nombres a los que habrá que acostumbrarse, si las propuestas prosperan. FRA o Factor de Revalorización Anual que preverá subidas de la pensión cuando haya más ingresos en la Seguridad Social que pensionistas. Y el FEI o Factor de Equidad Intergeneracional, un mecanismo para fijar la cuantía inicial de las prestaciones, ligada a la esperanza de vida.
Otra recomendación son las denominadas 'cláusula suelo', que impedirán la caída nominal de las pensiones aunque el sistema entre en nuevas crisis. Como novedad y a partir de 2014 podremos saber cuánto cobrará cada uno al jubilarse. Poco a poco nos iremos pareciendo a Suecia donde es normal desde los 30 años saber cuánto puede cobrar una persona cuando se retire del mercado laboral.

-¿Qué tal la experiencia de trabajar con desconocidos expertos como usted, durante mes y medio, para tratar un tema familiar como las pensiones?
-No ha estado mal. Conocía a varios, pero la experiencia ha sido positiva.
-¿Casi como un "Gran Hermano"?
-No, por favor. Afortunadamente han sido reuniones periódicas durante cuatro o cinco horas. Un total de seis reuniones que empezaron el 17 de abril y terminaron el 7 de junio. Cada uno aportaba su know how y el resultado está ahí.
-¿Como por ejemplo que el futuro de las pensiones no dependa del Gobierno de turno?
-Es sentido común, pero todavía no se ha aplicado. Teóricamente la revalorización de las pensiones tiene que hacerse con el IPC, pero se ha incumplido varias veces tanto por gobiernos del PSOE como del PP. En época de vacas flacas las pensiones se congelan o las suben menos. La previsión es que este año va a ver un déficit de caja de 15.000 millones de euros en la Seguridad Social por lo que será difícil que en 2013 se revaloricen según el IPC.
-Entonces ¿sugieren que el nuevo valor de revalorización no dependa del IPC?
-Exacto. Se trata de introducir un coeficiente automático y no depender tanto de las decisiones políticas. Es como un fármaco bueno para la Seguridad Social, porque la hará más sostenible y para el gobierno de turno que no tendrá que pensar cuánto revaloriza y cómo lo explica a la opinión pública.
-Este coeficiente o factor de sostenibilidad tengo entendido que lo forman el FRA y el FEI, ¿más nombrecitos?
-Igual lo cambian todo y después del trámite parlamentario no se aprueba. Hasta finales de julio no podremos saber mucho más.
-Deslíeme. ¿El FEI supondrá una caída de la pensión inicial cercana al 5% cada diez años, o sea, menos pensión?
-Este factor estaba previsto aplicarlo en la reforma de 2011 y es un factor de mantenimiento de lo que hay. Corrige la pensión inicial en función de la esperanza de vida. Iguala la suma total de pensiones que va a recibir una persona desde que se jubila hasta que fallece. Reduciría la pensión inicial un 5% cada diez años, suponiendo que las demás variables permanecieran constantes. Es decir sean constantes: la base de cotización, los años cotizados y la edad de jubilación.
-Es decir, ¿cuándo se jubile usted en 2027 cobrará un 10% menos de lo que le correspondería cobrar ahora?
-Claro. Cobraré lo que me corresponda, pero estará entre el 5% y el 10% menos. O puedo retrasar la edad de jubilación para evitar que me reste mucho ese factor de equidad. Lo que está claro es que necesitamos información para saber cuál será nuestra pensión y tomar las decisiones adecuadas.
-¿Será posible contar con esta información?
-Hay una propuesta para que a partir de 2014 la Seguridad Social informe a los mayores de 50 años de cuál va a ser la pensión que cobrarán cuando se jubilen con el fin de tener tiempo para complementarla si pueden y quieren.
-¿Por cierto qué hace un experto en pensiones con la suya?
-Es una decisión particular que depende de lo que cada uno quiera obtener cuando se jubile. Se puede ahorrar de muchas maneras. En vivienda, depósitos, planes de pensiones, etc.
-Entonces ¿es partidario de hacer hucha con los planes de pensiones?
-Soy partidario de que el sistema público de pensiones sea sostenible y saludable y que cada uno complemente su pensión hasta la medida que pueda. Lo que está claro es que la pensión supone una pérdida del poder adquisitivo de cualquier trabajador.
-Otra duda que se plantean los ciudadanos es cómo acertar con el plan de pensiones dados los antecedentes de casos como las preferentes...
-Desde luego si no entiende hay que asesorarse. En el informe entregado al Gobierno, implícitamente recomendamos incrementar la cultura financiera del país. No sólo se debería enseñar economía en las escuelas sino también finanzas y que las pensiones fueran un tema que todo el mundo conociera desde el bachillerato. Al fin y al cabo hasta para pedir un crédito se necesitan meros conocimientos. A la gente le cuesta mucho entender cómo funciona el sistema público de pensiones, de hecho a veces me cuesta hasta a mí y llevo 15 años trabajando en ello.
-Hemos visto el FEI ¿y el FRA?
-Afecta a todas las pensiones y es el factor que servirá para revalorizar las pensiones en sustitución del IPC, pero nunca rebasará el techo establecido, que está actualmente en 3.200 euros. El FRA prevé subidas de la pensión cuando el crecimiento de ingresos en la Seguridad Social sea mayor al del número de pensionistas. La previsión es que aumente el PIB más del 2% por lo que las pensiones medias reales crecerán.
-¿Aunque haya más desempleo y más pensionistas?
-La fórmula propuesta contempla esta situación. Y suponemos que se buscarán fórmulas, como la entrada de inmigrantes, reducir gastos mejorando la eficiencia del sistema, luchar contra el fraude a la Seguridad Social, etc, que aumentarán las cotizaciones, aumentarán los ingresos y el FRA. La fórmula del FRA no la tiene ningún país. El que más se aproxima es Alemania. El objetivo es llegar al equilibrio; la meta de todo sistema de reparto.
-¿Qué le parece la propuesta del PSOE de gravar las pensiones altas para financiar las pensiones?
-Las pensiones están sujetas al Impuesto sobre la Renta. Si lo que se busca es crear otro impuesto adicional nos encontraríamos ante una doble imposición que no tendría más sentido que el meramente recaudatorio.
-¿Hay quién dice que tras esta reforma de las pensiones no hay más que otro tijeretazo recortador?
-No estoy de acuerdo. Si la economía va bien la revalorización de las pensiones va a estar por encima del IPC, si va regular lo rondará.
-La meta es llegar al equilibrio, ¿cómo conseguirlo actualmente?
-De momento habrá que ajustar las pensiones. Luego, si se decide, aumentar el tipo de cotización a la Seguridad Social. Hoy es una medida difícil porque ya los empresarios se quejan de cómo se disparan los costes laborales. De todos modos la decisión está en el Parlamento. El sistema de pensiones es un reflejo de la salud de un país. Si aumenta el PIB la revalorización será mayor.
-Tengo entendido que España invierte en pensiones el 10,1% de su PIB, menos que la media de la Unión Europea...
-Sí. Lo que pasa es que los países que invierten más de su PIB son los que vivieron el baby boom años antes que nosotros. Nosotros lo viviremos a partir del 2026.
-Por cierto ¿formar parte del comité de expertos que cambiará el futuro de las pensiones estaba entre sus planes?
-La verdad es que no, pero teniendo en cuenta que llevo más de 15 años trabajando en temas de pensiones y los últimos, en factores de sostenibilidad, se comprende que el Instituto de Actuarios me propusiera para formar parte de dicho comité.
-Para elaborar este dictamen de 45 folios ¿contaban ustedes con suficiente información pública?
-La Seguridad Social sólo nos pasó proyecciones del número de pensiones que habrá en el 2050. Por eso hemos tenido que hacer simulaciones dentro del grupo.
-¿Pidieron más información?
-Sí, pero hubo problemas y al final parece ser que la Seguridad Social no quiso pasarnos más datos porque había filtraciones.
-Imagino que dentro de nada con la nueva Ley de Transparencia esto será una anécdota porque la información pasará a ser pública.
-Sin duda. Si finalmente se sigue adelante con el tema del factor de sostenibilidad la Seguridad Social tendrá que realizar un informe económico con las proyecciones reales. Nosotros hemos realizado nuestras proyecciones con datos de la Unión Europea. Allí sí son públicos los datos y no ha habido problemas para obtenerlo. Eso sí, eran datos a nivel macro.
-Por cierto, ¿dedicarse al estudio de las pensiones en su juventud, no es un poco raro?
-No, yo no lo veo así. Soy economista y actuario. Quizá esto último desarrolló más mis aptitudes financieras y al no ser muchos los especialistas en la materia opté por esta línea de trabajo. Junto a otros seis compañeros, tres de la Universidad de Valencia y tres de la Universidad de Extremadura hemos contribuido al sistema y recibido bastantes reconocimientos por estas aportaciones.
-De no jubilarse en España se jubilaría en...
-Suecia. Tienen sistema de reparto en el que a cada uno le cuenta lo que ha aportado realmente. Allí las reglas están muy claras, y desde los 30 años, cada uno sabe lo que tiene acumulado. Cuando se jubilan tienen en cuenta también la esperanza de vida. Aquí la fórmula está mal diseñada. No tiene en cuenta toda la carga laboral del individuo, ni todas las cotizaciones que realmente ha hecho... hay muchas cosas ficticias en el sistema español que no responde a cotizaciones reales, sean ayudas o subvenciones, etc.

PILAR MATEO: "Las ayudas a la investigación son indiscriminadas y carecen de orden"

Doctora, investigadora y empresaria, tiene en su haber indiscutibles éxitos en la lucha contra plagas biológicas en países pobres. Ahora está en África y se manifiesta en desacuerdo con el sistema español de ayudas a la investigación 

ALENCIA ."El futuro no está sólo en Alemania, está en África", comenta la doctora Pilar Mateo, quien en menos de cuatro meses inaugura una fábrica de pinturas, Inesfly África, para combatir la malaria en Ghana, y otra en Paiporta, para crear las microcápsulas donde se encierran las moléculas de insecticida. Dos proyectos con gran impacto porque generan numerosos puestos de trabajo local, previenen  enfermedades y erradican algunas de las consecuencias de la pobreza.
Pilar Mateo (Valencia, 1959) es doctora en Ciencias Químicas por la Universidad de Valencia y por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Doctor Honoris Causa por la Universidad Anáhuac de México y una de las top ten de la ciencia en España con numerosos reconocimientos y premios internacionales. En su haber cuenta con haber ganado la guerra al "Mal de Chagas" extendido entre las comunidades indígenas Guaraníes. Su tesón de 17 años le ha dado como premio expandir su actividad con la llegada de nuevos socios dispuestos a matar bacterias nocivas y parásitos que circulan por el mundo. Ya no toca tanto el piano, sus hijos se han hecho mayores, pero ella siente que su vida empieza hoy.
-Embajadora de los guaraníes y ¿embajadora en África?
-De momento tenemos dos proyectos en África. Por un lado la fábrica de pinturas que se inaugura dentro de cuatros meses y dará trabajo a muchas personas de allí, porque creemos que lo que cambia la pobreza es el trabajo; y por otro, el proyecto Painting Africa en el que colaboramos con la Fundación de Mujeres por África que preside María Teresa Fernández de la Vega. Llevamos ya trabajando un tiempo para combatir enfermedades endémicas como la malaria.
-Antes de volver al continente africano, ¿podemos confirmar que ha ganado la guerra al "Mal de Chagas"?
-Desde luego hemos demostrado que mi tecnología es eficaz para combatir el chinche del "Mal de Chagas", pero no puedo confirmar que hayamos acabado con el problema porque es muy grande, tanto como la pobreza que hay en esos países. 

-¿Pero con datos en la mano?
-Ahí sí. Las constataciones científicas que se han publicado evidencian los resultados. Hemos pintado más de 8.000 casas y se ha visto que ningún niño nacido en estas casas tiene el "Mal de Chagas". 

-¿Ha costado mucho obtener esas constataciones científicas?
-Bueno, casi 17 años. Al principio era muy difícil que nadie viniera a evaluar los resultados de nuestras acciones hasta que finalmente se consiguió.

-El premio es que ahora se la rifan...
-Casi que sí. Recibimos propuestas de numerosas partes del mundo que necesitan reducir sus producciones de mosquitos. Sin duda las publicaciones científicas que hablan de nuestra tecnología han despertado mucho interés. Entre otras partes en África. Por eso estamos construyendo una nave de casi 10.000 metros cuadrados en la capital de Ghana, Accra.
-¿Dónde radica el éxito de su tecnología?
-Por un lado porque la pintura contiene en microcápsulas el insecticida que acaba con el bicho que se acomoda en las paredes, además embellecemos las casas y por otro porque contribuimos a la higiene familiar y damos trabajo. Por todo ello existe una gran demanda de multinacionales pidiendo que encapsulemos moléculas de insecticidas.
-¿Con qué otros bichos, además del Tripanosomiasis americana, Leishmaniasis, el dengue y la malaria, se relaciona? 
-Ahora estamos patentando un proyecto para acabar con el picudo rojo.
-Después de tantos años combatiendo a los bichos y entre la pobreza, ¿se ha empobrecido o enriquecido?
-Depende de cómo se vea. En la parte personal me he enriquecido enormemente. ¡Vaya, no lo cambio! Económicamente no me he llegado a empobrecer. Gracias a mi padre, a que la tecnología ha funcionado y a que ahora tengo unos socios que han creído en ella.
-¿Con una inversión de 10 millones de euros para crear Inesfly Corporation llegarán a todo?
-En ello estamos. Inauguramos además de las dos fábricas en África y Paiporta un centro de investigación para nuevas patentes que va a dar mucho que hablar. Estoy muy contenta porque después de 17 años viviendo en los sitios más pobres, con una tecnología para ellos, de repente esto se ha convertido en una fuente de trabajo en África y España.
-Tengo entendido que viaja, pinta, negocia, crea fundaciones y además investiga, ¿un investigador no tiene que estar todo el día delante del microscopio?
-Me da tiempo, pero gracias a esta nueva situación estamos contratando gente. De aquí a final de año tenemos previsto contratar a 21 jóvenes del mundo de la ciencia.
En Äfrica

-¿Después de tanto recorrido aún le queda mecha?
-Digamos que el momento importante empieza ahora. Hasta ahora ha sido muy difícil porque al dedicarte a los pobres nadie venía a evaluarte. En el Chaco Boliviano no hay ni ONGs. Al final conseguimos que vinieran los mejores científicos del mundo a constatar el trabajo. Pero costó.
-Del pueblo guaraní que conoció al que es hoy ¿ha cambiado mucho?
-Creo que sobre todo el movimiento de mujeres indígenas ha crecido mucho. Tienen escuela de hostelería, peluquería, gabinete jurídico, mujeres que juegan al fútbol, guarderías, autobuses que recogen a los niños para ir al colegio, etc. Si algo caracteriza esta tecnología es, además de sus resultados científicos, la movilización social que genera.
-Una mujer que ha vivido tantos años en la selva, ¿qué tal se lleva en el asfalto?
-La verdad es que últimamente echo de menos la selva y estamos pensando en irnos a vivir fuera de la ciudad.
-¿Qué frase no olvidará nunca?
-La que hizo que empezara. La del médico que me llamó pidiéndome ayuda porque él también tenía el "Mal de Chagas" y se moría como el resto del poblado. Me fui pensando que en un mes lo solucionaría y me quedé 17 años. Allí no había carreteras, ni paredes para pintar por lo que aprendí a construir casas y el idioma de los guaranís. El premio es que una madre me diga: "doctocita, mi hijo no tiene Chagas". Ese es el nobel que me da.
-¿Y el momento más duro?
-Cuando recibí mi primera amenaza de muerte. Cuando haces algo que puede cambiar la sociedad, molesta. No creo que quisieran matarme, pero sin duda querían que me fuera. Me hizo más fuerte y me quedé.
-¿Hará lo mismo en África?
-Allí hay que hablar de malaria. No hay que olvidar que en 1964 la OMS declara libre de malaria a España. Hace 50 años se erradico en España una enfermedad que mata millones de personas. La vacuna hoy por hoy no está. No se le puede decir a la gente, ¡aguanta 20 años a ver si la inventan! En España se erradicó con DDT. La OMS aconseja su uso. ¿Pero qué pasa? En esos países el clima es caluroso todo el año. Y con el DDT no es suficiente. Esta tecnología es eficaz para controlar el mosquito en el ámbito humano. El trabajo a realizar será tratamiento del insecto, tratamiento clínico e higiene y limpieza. Este es el principal problema en estos países, la porquería. Al final quien se muere de malaria no son los ricos, pero como pasa en todas las enfermedades. El 99% de las personas que se mueren por contraer una enfermedad son pobres.
-La juventud piensa que el futuro está en Alemania ¿y usted?
-Creo que está en África. La vida es muy cara en estos sitios porque no hay clase media. Hay muchos ricos y muchos más pobres. Ángola es quizá un país más estable, democrático, con gran crecimiento, tiene petróleo, oro, minerales y es adonde se están marchando las grandes empresas. Es espectacular ver cómo se están construyendo a la vez más de 300 edificios de oficinas. Pasar una noche en el hotel más barato cuesta 200 dólares, un empaste 500 dólares. Pero no solo es en Ghana y Angola, en conjunto África es el gran continente. No hay especialistas y por eso es tan caro. La juventud puede empezar a pensar que el futuro no está sólo en Alemania, también está en África. Hay países que están mal, hay violencia, quizá los francófonos, pero es que África es enorme.
-¿Se ha encontrado con muchos españoles por África?
-No, todavía es el gran desconocido. Hay mucha gente que conoce el África que se muere y no el que está saliendo adelante. Es un continente en el que está todo por hacer. Lo que tienen que hacer los buenos políticos es hacer negociaciones de países y que participen también las empresas españolas.
-Sé que hay muchas empresas chinas ¿y españolas?
-Que yo sepa no hay, pero no las conozco todas. Irse allí a fabricar puede suponer más trabajo, allí y aquí. Las microcápsulas saldrán de España y allí se hará la pintura.
-¿Se pregunta alguna vez por qué en el siglo tecnológico hay tanta pobreza y enfermedades?
-En este mundo la mitad del planeta se muere de cosas que se han solucionado en la otra mitad, pero no sabemos cómo aconsejar. Por ejemplo el sarampión tiene vacuna y nos la ponen casi que al nacer. Pues se mueren cada año más de 300.000 niños por no ser vacunados.
-¿Tanto dinero genera la pobreza?
-Pues sí. El mundo de la pobreza sólo interesa como negocio. Hay mucha gente que vive de los pobres. Se sabe dónde están los problemas y cómo solucionarlos, pero no se asumen responsabilidades. Por ejemplo en el caso del "Mal de Chagas" el problema es una vivienda, sabes que por debajo, donde viven los guaraníes, pasa todo el gas que explotan grandes empresas, sabes que la enfermedad dura 100 años. Puedes ver el problema y actuar, o verlo y pasar de todo.
-Como experta en insectors ¿se los comería como recomienda la FAO, Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura?
-Me parece una ridiculez. Desde luego lo han explicado mal porque ¿quién se va a comer un bicho que parasita en tu interior y te mata? A no ser que sea cocinado en las condiciones adecuadas... Y en esos países condiciones desde luego no las hay.
-Tengo entendido que en el mundo de las patentes se mueve bien, ¿cuántas tiene?
-Siete patentes y varias familias de patentes. Una de ellas está en 80 países. Hay que tener en cuenta que en España la gente confunde registrar una patente con seguirla. Que eso es lo que vale dinero. La patente tarda tiempo porque tienen que hacerte un estudio para comprobar que sí es una novedad mundial. Cuando patentas en otros países cada país te evalúa y eso es carísimo. Por eso patentes que funcionan en muchos países no hay tantas.
-¿A la investigación en España le ha tocado el bicho de la crisis?
-Creo que es importante ayudar en el tema de la investigación, pero también poner las cosas en su sitio.
-¿A qué se refiere?
-A que hay investigaciones muy buenas y otras no. No puede ser que no haya orden al respecto y se concedan ayudas indiscriminadamente. Hay que analizar el nivel internacional de las investigaciones, su sentido y racionalizar los recursos. Echo en falta más patentes buenas españolas en el mundo.
-¿Usted ha recibido subvenciones?
-Directamente no. En el mundo de la investigación está todo muy organizado. El dinero para investigar está pensando para universidades, centros de investigación, parques tecnológicos, etc, pero no para los investigadores privados. Soy investigadora desde la observación de la realidad. Hay un problema. Hay una solución. Sin embargo indirectamente, y a través de alguna ONG, se recibió alguna ayuda para terminar un proyecto sobre la malaria.
-¿Y cómo funcionaba?
-Aún me lo pregunto, porque como tampoco facturaba porque era una empresa dedicada a los más pobres, ¿a quién le iba a vender? Así que me resultaba difícil entrar en el circuito de financiación de las empresas porque allí te piden balances.
-¿En el mundo de la investigación hay también discriminación por género?
-De hecho las palabras lo manifiestan. No es lo mismo inventor que inventora. A un hombre lo ven como profesor y doctor, a una mujer la llaman por su nombre. Un hecho curioso es que el 75% de las personas que entran en la universidad son mujeres, sólo el 25% son catedráticas y no hay en España ninguna mujer catedrática ni en Pediatría, ni en Ginecología..